La empresa de hemoderivados registró hasta marzo unas pérdidas netas de 108,2 millones de euros, en contraste con las ganancias de 53,3 millones del mismo periodo de 2022.
La compañía ha explicado que estas pérdidas, ya previstas, se deben a costes de reestructuración por importe de 140 millones de euros asociados a su plan de transformación.
Asimismo, Grifols notificó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que a cierre de marzo su beneficio neto ajustado se situó en 26 millones de euros y sus ingresos totales se dispararon un 23,2%, hasta los 1.561 millones de euros, por los “buenos” resultados de Biopharma, cuyos ingresos crecieron un 26,2% en el primer trimestre, hasta los 1.291 millones de euros.
Thomas Glanzmann, presidente ejecutivo y CEO de Grifols, ha subrayado que los resultados de la compañía muestran un “trimestre sólido a pesar del difícil entorno macroeconómico”, recoge Europa Press. “Nuestros resultados ponen de manifiesto la fortaleza de nuestro negocio. Resultan especialmente significativos los progresos que estamos logrando a medida que avanza 2023 para impulsar la eficiencia operativa de la compañía y mejorar nuestra base de costes de plasma. La simplificación de nuestro modelo de gobernanza y la nueva estructura de liderazgo continuarán impulsando esta transformación”, ha destacado.