La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ha reafirmado su disposición a actuar para garantizar la estabilidad de precios en la zona euro, frente a las amenazas comerciales provenientes de Estados Unidos. La advertencia llega en un contexto de creciente preocupación por los aranceles que la Administración estadounidense pretende imponer a productos procedentes de la Unión Europea (UE).
En la rueda de prensa posterior a la reunión informal de ministros de Economía y Finanzas de la UE, celebrada en Varsovia (Polonia), Lagarde dejó claro que el BCE permanece atento a los riesgos derivados de esta escalada comercial.
El BCE listo para actuar si se materializan los riesgos
Durante su intervención, Christine Lagarde recordó que el BCE «vigila y está siempre dispuesto a utilizar los instrumentos que tiene a su disposición» para mantener tanto la estabilidad de precios como la estabilidad financiera, dos objetivos que, según subrayó, «no van el uno sin el otro».
«El BCE ha presentado en el pasado los instrumentos y herramientas adecuados que eran necesarios para procurar la estabilidad de los precios y, por supuesto, la estabilidad financiera», afirmó Lagarde en Varsovia
Esta declaración cobra especial importancia dado que falta apenas una semana para la próxima reunión de política monetaria del BCE, donde se analizarán los efectos económicos de los aranceles en caso de que finalmente se apliquen.
Aranceles del 30%: una amenaza latente
Christine Lagarde adelantó que el impacto potencial o efectivo de los aranceles será uno de los factores que el BCE tendrá «obviamente» en cuenta en su próxima revisión de política monetaria.
En este sentido, advirtió que, si la Administración estadounidense opta finalmente por aplicar las tasas actualmente suspendidas por un plazo de 90 días, los aranceles alcanzarían un 30%. Este nivel de gravamen supondría un duro golpe para el comercio entre ambos bloques, incrementando la presión inflacionaria en la zona euro y afectando al crecimiento económico.