Así lo suscribieron durante la ‘IV Cumbre Ibérica de la Sanidad Privada’, celebrada el pasado jueves en Madrid y en la que se dieron cita numerosos expertos del sector de España y Portugal, además de Turquía.
“España, Portugal y Turquía, aunque diferentes en muchos aspectos, compartimos un compromiso común con la mejora de nuestros sistemas de salud. Y como sabemos, nuestro sector juega un papel fundamental en este esfuerzo, contribuyendo de manera sustancial a la accesibilidad y calidad de los servicios sanitarios”, destacó Carlos Rus, presidente de ASPE.
Dicha cumbre congregó a los embajadores de Portugal y Turquía en España, el Excmo. Sr.João Mira-Gomes y la Excma. Sra. Nüket Küçükel Ezberci, así como la presidenta de UNESPA, Mirenchu del Valle, quien expresó el compromiso del sector asegurador de mantener un diálogo abierto y constante con el de la provisión sanitaria, ya que siempre “existen puntos de encuentro y mejora”.
La cita la clausuró Antonio Garamendi, presidente de CEOE, que abogó por la imprescindible colaboración público-privada en materia sanitaria porque “si hay un sector en el que esta cooperación funciona bien es precisamente el sanitario”, y manifestó su perplejidad “respecto al debate cuando se habla del cisma entre lo público y lo privado”. “No podemos excluir recursos en la situación de crisis asistencial que vivimos, ya que aquí nos necesitamos todos”, defendió.
Garamendi afirmó que “a las empresas españolas no nos entra en la cabeza planteamientos ideológicos desde la Administración que nada tienen que ver con los planteamientos de eficiencia, servicio público y colaboración, que son los que nosotros manejamos”.
“El valor de la sanidad privada”
En la ‘Declaración de Madrid’, las entidades firmantes -basándose en las similitudes entre el sistema español y el portugués- señalan que “el sector sanitario privado tiene una capacidad significativa para aportar más inversión, acceso, eficiencia, flexibilidad y resistencia a los sistemas sanitarios” y ponen en valor la elevada inversión que ha realizado el sector de provisión sanitaria en las últimas décadas, tanto en recursos humanos como en equipamiento e innovación, para disponer de unas infraestructuras de excelencia.
No obstante, en el documento se constatan los principales desafíos a los que se enfrenta el sector, entre ellos la escasez de profesionales, para lo que se recomienda que “se tomen las medidas adecuadas para atraer a los jóvenes profesionales al sector y disponer de condiciones de formación adecuadas a las necesidades del sistema”.
Asimismo, los firmantes reclaman a los financiadores de los distintos modelos sanitarios (colaboración público-privada, mutualismo administrativo y aseguramiento privado) tener en cuenta las particularidades de un sector que realiza importantes inversiones en innovación quirúrgica y tecnológica, en un contexto inflacionario que repercute en el incremento notable de los costes sanitarios.
La necesidad de una mayor colaboración público-privada también tiene su espacio en la ‘Declaración de Madrid’, donde se alerta a las Administraciones del “peligro de que algunas medidas puedan implicar el debilitamiento o desmantelamiento de la oferta privada” y se rechaza “cualquier iniciativa discriminatoria que desestructure el sector, genere inestabilidad y penalice a ciudadanos y profesionales”.
Asimismo, los hospitales privados de Portugal y España solicitan a sus respectivos ministerios de Sanidad que implanten adecuadamente el Espacio Europeo de Datos Sanitarios, destacando el hecho de que “los datos pertenecen a las personas y no a ningún Estado o institución”.