Apertura plana de las bolsas europeas, que dudan sobre seguir la estela alcista marcada ayer por Wall Street gracias a los empujones de Amazon y Apple. En un mercado que sigue muy pendiente del covid-19, el anuncio de J&J de que ha tenido que detener los ensayos de su vacuna es suficiente para devolver las dudas a los inversores.
“Asociamos la debilidad en la apertura europea a la pausa que ha tenido que hacer Johnson&Johnson en sus ensayos de fase 3 para la vacuna Covid debido a la aparición de síntomas de una enfermedad imprevista en uno de los participantes en el estudio”, señalan los analistas de Renta 4 en su informe diario de apertura. “Recordamos que algo similar le ocurrió a la vacuna de Astrazeneca, que ha podido retomar sus ensayos en la mayoría de países excepto en EEUU”.
En cuanto a los esperados estímulos económicos, el mercado sigue a la espera de que republicanos y demócratas lleguen a un acuerdo en EEUU sobre el quinto paquete de estímulo fiscal, aunque poco a poco se reducen las expectativas de que se logre antes de las elecciones del 3 de noviembre.
Ante este panorama, el Ibex 35, que ayer cerró completamente plano (0,0%), baja un 0,11% en los primeros movimientos de la sesión hasta quedarse en 9.943 puntos. Ligeras pérdidas de entre el 0,08% y el 0,10% para el Dax alemán y el Cac francés en los primeros compases de la negociación. El Mib italiano se dejaba un 0,03% y el Ftse de Londres un 0,01%.
En la jornada asiática, números mixtos con el Topix en Japón subiendo un 0,4%, pero la bolsa de Shanghái plana y el Kospi de Seúl dejándose un 0,1%. El S&P/ASX 200 de Australia sumaba un 1%.
En los mercados de materias primas, se espera que continúe la toma de beneficios en el mercado del crudo, donde el Brent de referencia en Europa bajó ayer un 3% tras subidas del 12% la semana anterior, en un movimiento “lógico” por el incremento de oferta que suponen tanto la reanudación de operaciones en el Golfo de México (al perder intensidad el Huracán Delta) y la vuelta a producción del principal campo en Libia, entorpeciendo los intentos de la OPEP+ por controlar la oferta en un contexto de aún débil demanda derivado de la evolución de la pandemia, señala Renta 4.