Las rentas de alquiler se han disparado en 2017 a un ritmo de dos dígitos que se prevé continúe durante este año. Un aumento de los precios que deja ‘fuera del mercado’ a quienes tienen menores ingresos -especialmente a los jóvenes- y al que contribuye el furor por los pisos turísticos..
Los expertos atribuyen el alza desmedida de los alquileres al aumento de la demanda –ya que la precariedad laboral impide acceder a la compra- y al interés de inversores y particulares que buscan una suculenta rentabilidad.