En su comunicado, la entidad ha subrayado que ya dispone de “mayor confianza” en que la inflación está convergiendo de forma sostenida con el objetivo de estabilidad de precios del 2%. Así, el FOMC ha indicado que a la hora de modificar la tasa de referencia estará atento a los datos entrantes, la evolución del entorno macroeconómico y el balance de riesgos, según Europa Press.
“Los indicadores recientes sugieren que la actividad económica ha seguido creciendo a buen ritmo. El aumento del empleo se ha ralentizado y la tasa de paro ha subido, pero sigue siendo baja. La inflación ha seguido avanzando hacia el objetivo del 2% fijado por el Comité, pero sigue siendo algo elevada”, ha resumido la Fed.
“Recalibrar” la política monetaria
El presidente de la Fed, Jerome Powell, ha afirmado que el recorte en los tipos de interés de 50 puntos básicos acordado responde a la necesidad de “recalibrar” la política monetaria ante los progresos en materia de inflación y de empleo.
“Sabemos que ha llegado el momento de recalibrar nuestra política hacia algo más apropiado dados los avances en materia de inflación y empleo. Ahora el balance de riesgos está equilibrado. Y este es el comienzo de ese proceso”, ha explicado Powell en rueda de prensa.
En este sentido, recoge la citada agencia, el líder de la Fed ha reconocido que los riesgos al alza para la inflación “realmente han bajado”, mientras que las amenazas de desaceleración del mercado laboral “se han incrementado”.
Powell ha indicado que la “paciencia” del organismo y su política de “alto el fuego” ha permitido que la Fed esté en una “muy buena posición” para abordar estos riesgos al mandato doble de estabilidad de precios y máximo empleo.
Por este motivo, ante la convicción de que la inflación retornará al 2% “con el tiempo” y que no se estima como “necesaria” una ralentización adicional del empleo para asegurar dicha meta, se ha optado por reducir el precio del dinero por primera vez desde marzo de 2020, con los primeros compases de la pandemia de Covid-19.
“Ciertamente, parece que estamos muy cerca del punto, si es que no estamos ya en él, en el que un mayor descenso de las vacantes de empleo se traducirá de forma más clara en desempleo”, ha augurado Powell.
Respecto a la salud de la economía de Estados Unidos, Powell ha asegurado que está en “buena forma” por su crecimiento “sólido”, inflación a la baja y un empleo que avanza a un “ritmo vigoroso”. “El objetivo de nuestro ajuste de tipos de hoy es que esto siga siendo así”, ha razonado.
En cualquier caso, el presidente de la Fed ha indicado al final de su comparecencia que no aprecia signos que evidencien la posibilidad a corto plazo de una desaceleración en el país.