Trump confía en que Rusia está dispuesta a negociar y su equipo intensifica las conversaciones con Ucrania. Además, la Casa Blanca destaca la importancia de un acuerdo económico sobre minerales.
Trump apuesta por la paz en Ucrania
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está «luchando para llegar a un acuerdo» entre Ucrania y Rusia con el objetivo de frenar la guerra, según ha afirmado este sábado la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
«Trump cree firmemente que Rusia está dispuesta a negociar y está luchando para ello», ha asegurado Leavitt en declaraciones a la prensa. Además, ha remarcado que el mandatario estadounidense “quiere dejar de ver morir a hombres inocentes” y que “quiere la paz”.
“Es su objetivo final ahora mismo, y eso es lo que tiene en mente esta noche”, subrayó la portavoz.
Por su parte, el asesor de Seguridad Nacional, Michael Waltz, se encuentra trabajando intensamente para alcanzar un acuerdo. Según Leavitt, Waltz “va a estar trabajando sin descanso todo el fin de semana para cerrar el pacto y poner fin a este conflicto con Ucrania”.
Negociaciones y economía: el acuerdo de los minerales
La Casa Blanca también ha destacado la importancia del acuerdo sobre minerales estratégicos entre Estados Unidos y Ucrania. Según Leavitt, esta alianza «es una pieza clave» para Trump porque permitirá recuperar el dinero de los impuestos estadounidenses y, al mismo tiempo, impulsar una gran asociación económica con Ucrania para su reconstrucción tras la guerra.
“Será una gran oportunidad económica para ambos países”, enfatizó la portavoz.
Preocupación por la salud del papa Francisco
Mientras tanto, en el ámbito internacional, crece la preocupación por la salud del papa Francisco, quien se encuentra en estado crítico tras sufrir una crisis asmática este sábado.
Leavitt ha confirmado que Trump ha sido informado sobre la situación y que próximamente emitirá una declaración al respecto. “Nuestros pensamientos y oraciones están con él”, expresó la portavoz.
Según fuentes del Vaticano, el pontífice recibió una transfusión de sangre tras experimentar una crisis respiratoria asmática prolongada que requirió suministro de oxígeno.
La comunidad internacional sigue de cerca su evolución, mientras se mantiene la incertidumbre sobre su estado de salud.
