La banca islandesa se enfrenta a un agujero adicional de 2.500 millones de euros después de que el mayor grupo de protección de los propietarios en el país haya decidido demandar a las entidades financieras que indexaron las hipotecas a la inflación.
Los bancos, que perdieron un caso similar en 2010 por vincular los préstamos a tipos de cambio, ya han perdonado a 2.100 millones en deuda desde que la crisis de Islandia en 2008 acabó con la industria financiera, según publica Bloomberg.
En dos demandas separadas, los bancos han sido demandados por la venta de préstamos vinculados a la inflación que supuestamente chocarían con las leyes del Espacio Económico Europeo, que prohíben las cláusulas abusivas para los consumidores.
Vilhjalmur Bjarnason, presidente de la Asociación de Casas de Reykjavik, que representa al 10% de los propietarios de Islandia, está instando a los tribunales a que “corrijan la injusticia” cometida con los compradores, después de la caída de la corona en 2008 enviase a la inflación hasta una tasa de hasta el 19%.
Las ganancias en el índice de precios al consumidor han supuesto unos 400.000 millones de coronas (2.500 millones de euros) a la deuda privada, ha defendido Bjarnason en una entrevista a la agencia estadounidense.