Un juez federal de EEUU ha aprobado el acuerdo entre el banco británico HSBC y los investigadores federales y estatales por el que el banco de inversión pagará una multa récord de 1.920 millones de dólares (unos 1.470 millones de euros), por haber ignorado las leyes diseñadas para evitar el blanqueo de dinero y bloquear las transacciones con países sancionados por Washington.
El juez de distrito en Brooklyn, Nueva York, John Gleeson afirmó que su decisión sobre el trato fue «sencilla, porque consigue mucho», aunque reconoció las «fuertes críticas públicas» tras permitir a HSBC evitar un proceso penal. Esta es la mayor penalización que se ha adoptado en EEUU contra un banco, ya que dobla los 780 millones impuestos al suizo UBS en 2009, en su caso por facilitar la evasión fiscal.
La multa permitirá a HSBC que queden desestimadas las acusaciones que pesaban sobre la firma de haberse convertido en la «institución financiera preferida» por los cárteles mexicanos y colombianos, grupos de blanqueo de dinero y otras prácticas ilegales a través de lo que el Departamento de Justicia calificó como «impactantes brechas de supervisión».