El minorista estadounidense Wal-Mart ha centrado su atención en China para desarrollar sus nuevos proyectos. En concreto, parece que la cadena ha comprado tierras en el país asiático para construir nuevas tiendas, con lo que abandona la estrategia que había seguido en la última década, basada en el alquiler, tras la subida del precio de los arrendamientos.
No obstante, según publica Bloomberg Wal-Mart no ha sido la única compañía que ha optado por este nuevo modelo. Aunque el mayor minorista del mundo compró hace un año varios terrenos en Dalian, una ciudad del noreste del país, la cadena sueca Ikea podría haberle superado tras invertir 1.200 millones de dólares para construir 510.000 metros cuadrados de centros comerciales en China.
Las cadenas minoristas han optado por comprar terrenos después de que los alquileres se dispararan en el país asiático. Estos arrendamientos subieron tras el lanzamiento, en 2008, de un programa de estímulo de cuatro billones de yuanes (unos 619.000 millones de dólares), con el que se consiguió revitalizar el crecimiento económico del país.
Wal-Mart ya ha abierto 339 tiendas en más de 120 ciudades chinas, aunque podría incrementar su inversión ante la previsión de que se producirán grandes migraciones de la población hacia las ciudades.