La poderosa familia Luksic quiere plantar cara a Emilio Botín, presidente del Banco Santander, para impedir que la filial chilena de la entidad española siga con el dominio del mercado local. Los Luksic, que controlan el Banco de Chile, venderán parte de su participación en la entidad a la estadounidense Citigroup para que esta llegue a controlar más del 40% del Banco de Chile.
Los Luksics y los Botín fueron socios hasta que en el año 1999 la familia más poderosa de Chile se quedó con el control del Banco de Santiago y cedió sus participaciones en el Santander. Desde entonces se enfrentan por el dominio del mercado chileno, que por ahora controla Botín.
Esta operación es una opción de compra que Citigroup acordó con los Luksic cuando llegaron a un acuerdo en 2007, al adquirir una participación del 32,96% en la sociedad LQ Inversiones Financieras, filial del grupo local Quiñenco que maneja al Banco de Chile. El acuerdo también contempla la posibilidad de que Citigroup suba su participación en la entidad financiera hasta llegar al 50%.
Los analistas consultados por este diario han destacado que esta operación se produzca justo ahora que Bachellet deja el Gobierno de Chile y Obama es el presidente de EEUU.