En concreto, el pasado lunes, 3 de julio, Iberdrola comenzó un proceso de amortización de 206,36 millones de acciones propias en autocartera, con el objetivo de reducir su capital social en 154,77 millones de euros.
Esta operación fue aprobada por la junta general ordinaria de accionistas de Iberdrola el pasado 28 de abril y, posteriormente, el consejo de administración dio la orden de ejecución.
Esta reducción de capital se ha realizado con cargo a reservas de libre disposición, realizando la correspondiente dotación de una reserva por capital amortizado, por importe igual al valor nominal de las acciones propias efectivamente amortizadas.