El gigante tecnológico Apple se reembolsó además otros casi 10 millones por el reciclaje de cobre, aluminio y la plata de sus dispositivos obsoletos. El reciclaje se ha convertido en un gran aliado para Apple. Además de contribuir a la protección del medio ambiente, permite a la compañía tecnológica recuperar los valiosos componentes que incorporan los viejos iPhones, iPads y ordenadores, como el oro, el cobre, el aluminio o la plata.
En concreto, según ha revelado el gigante de la manzana mordida en su último informe de ‘Responsabilidad ambiental’, recuperó cerca de una tonelada métrica de oro en 2015, lo que equivale a unos 40 millones de dólares (35,4 millones de euros). El metal amarillo se utiliza en los componentes internos y los circuitos de muchos ‘smartphones’, pero en el caso de determinados modelos especiales de iPhone está presente también en su exterior.
Lo mismo ocurre, y aún en mayor cantidad, en el Apple Watch con revestimiento de oro: incorpora hasta 50 gramos de 18 kilates.
Además, la firma se reembolsó casi 10 millones de euros más gracias a otros materiales. En total, Apple recuperó el año pasado casi 28 millones de kilos de acero, aluminio, cristal, cobre, plata y oro.