En el primer semestre de 2019, el precio medio de la electricidad en la Unión Europea (UE) aumentó ligeramente en comparación con el mismo periodo de 2018, pasando de 20 a 21 euros los 100 kWh.
La factura de la luz más baja se produjo en Bulgaria (9,9 euros por 100 kWh), Hungría (11,2 euros) y Lituania (12,5 euros). En el lado contrario, Alemania (30,9 euros), Dinamarca (29,8 euros) y Bélgica (28,4 euros).
España, por su parte, es el quinto país de Europa con el precio de la electricidad más alto.