La entidad ha justificado las movilizaciones por “el ataque fascista de la GestACCO» –juego de palabras entre Gestapo y el acrónimo de la Autoridad Catalana de la Competencia (ACCO)– contra lo que la entidad considera la libertad de expresión.
Este martes, la ACCO hizo pública una sanción a la entidad de 122.910 euros por infringir la Ley de defensa de la competencia por una “recomendación colectiva de boicot a Uber y otros operadores” que implica una infracción muy grave del artículo 1.1 de la Ley de Defensa de la Competencia (LDC), según Europa Press.