El Gobierno ha sacado pecho tras la renuncia “provisional” de Carles Puigdemont a ser el candidato a presidir la Generalitat de Cataluña. Para los de Mariano Rajoy esta decisión no ha sido voluntaria, sino que se ha visto obligado a tomarla por la “determinación” del Ejecutivo. Así lo creen en Moncloa, que ha advertido al ‘expresident’ de que no vivirá “a costa del erario público”.
“Después de mes y medio, Puigdemont asume que no va a ser presidente de la Generalitat, algo que no hubiera sido posible sin la determinación del Gobierno de utilizar todos los recursos a su alcance para impedir esa burla a la legalidad vigente”, reivindican desde Moncloa, según Europa Press.
Una tesis que ha defendido también la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que ha afirmado en su cuenta personal de Twitter que Puigdemont “no será president de la Generalitat porque el Gobierno recurrió su candidatura al Tribunal Constitucional”. Asimismo, ha señalado que no permitirán “estructuras paralelas, ni que salga un sólo euro del erario público para que viva en Bruselas”.
.@KRLS no será president de la Generalitat porque el Gobierno recurrió su candidatura al #TConstitucional.
No permitiremos estructuras paralelas, ni que salga un sólo euro del erario público para que viva en Bruselas— Sáenz de Santamaría (@Sorayapp) 1 de marzo de 2018
Asimismo, Sáenz de Santamaría criticaba anoche en la Cope que el ex jefe del Govern haya estado “mareando la perdiz” y haya hecho “perder el tiempo a los catalanes y a la convivencia en Cataluña” al tardar mes y medio en renunciar a ser investido. Algo que, según la ‘número dos’ del Ejecutivo, sabía “desde el primer momento”, ya que una “persona fugada de la Justicia” no se puede someter a una investidura.
Respecto a que Jordi Sànchez pueda ser investido la vicepresidenta defiende que se trata de “un señor que está en prisión” y tendrá que ser el Tribunal Supremo el que decida “si puede o no someterse a la investidura”. En su opinión, según recoge la mencionada agencia, “difícilmente puede representar a la comunidad autónoma y puede cumplir con normalidad los deberes de un presidente que tiene que estar dedicado en cuerpo y alma a gestionar los intereses y servicios de esa comunidad”.
Sáenz de Santamaría también censura el “ejercicio de abdicación” del expresidente de la Generalitat en Sànchez. “Puigdemont no es quien pone o quien quita, sino los representantes del Parlament”, recuerda.
Jordi Sànchez recogió anoche el guante lanzado por Puigdemont y afirmó en un mensaje en su cuenta de Twitter que “es un gran honor y una enorme responsabilidad poder representar al pueblo de Cataluña”.
És un gran honor i una enorme responsabilitat poder representar el poble de Catalunya. El President @KRLS, el Vicepresident @junqueras junt amb tots els consellers destituïts pel 155 són el veritable Govern legitim de Catalunya. Sempre amb vosaltres! #llibertat https://t.co/x5kJjhSedY
— Jordi Sànchez (@jordialapreso) 1 de marzo de 2018