«No hay que mandarle dos comunicaciones, que se le mandaron dos por la Fiscalía, al abogado que representaba a don Juan Carlos», ha señalado Castro, en Palma, durante la presentación de su libro autobiográfico ‘Barrotes retorcidos. Memorias de un juez’.
Con todo, el que fuese juez instructor del Caso Nóos ha admitido que «llamar a declarar al rey emérito es muy gordo» y «hay que tener ganas».