Cuatro miembros habrían preferido subir los tipos en 50 puntos básicos hasta el 0,75%, frente a los cinco que han votado a favor de la subida de 25 puntos básicos. Con estos incrementos, la autoridad monetaria inglesa se adelanta a la Reserva Federal y el Banco Central Europeo (BCE).
A falta de conocer el dato de enero, la tasa de inflación del Reino Unido se situó el pasado mes de diciembre en el 5,4%, tres décimas por encima de la subida registrada el mes anterior, lo que supone el mayor encarecimiento del coste de la vida en el país desde 1992.
Por otro lado, el Comité ha votado por unanimidad para que el Banco de Inglaterra comience a reducir el ‘stock’ de compras de bonos del Gobierno del Reino Unido, financiadas por la emisión de reservas del banco central, al dejar de reinvertir activos vencidos. También para que la institución comience a reducir las compras de bonos corporativos no financieros, financiadas por la emisión de reservas del banco central, al dejar de reinvertir los activos que vencen.
“El Comité acuerda en esta reunión que el Banco de Inglaterra debe dejar de reinvertir cualquier vencimiento futuro que venza de su ‘stock’ de compras de bonos del Gobierno del Reino Unido”, ha explicado la entidad, subrayando que esto refleja “la intención del Comité de reducir sus tenencias de bonos del Gobierno de manera gradual y predecible”.
En su análisis, el Banco de Inglaterra espera que la inflación siga aumentando en los próximos meses y se sitúe cerca del 6% en febrero y marzo, antes de alcanzar un máximo de alrededor del 7,25% en abril, lo que supondría un incremento de 2 puntos porcentuales sobre el máximo previsto en su informe del pasado mes de noviembre.
No obstante, sigue confiando en que las presiones alcistas sobre la inflación se disipen con el tiempo, ya que se supone que los precios mundiales de la energía permanecerán constantes después de seis meses, y a medida que los cuellos de botella mundiales disminuyan y los precios de los bienes retrocedan un poco.
De esta manera, la entidad proyecta que la inflación del Reino Unido retrocederá hasta un poco por encima del objetivo del 2% dentro de dos años y por debajo del objetivo en un margen de tres años.