El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha hecho un llamamiento a «orar por España» mientras «no se aclare el futuro incierto» del país, que a su juicio se encuentra en «una situación crítica» y «de verdadera emergencia».
Cañizares se ha expresado en estos términos en una carta abierta a toda la diócesis de Valencia, coincidiendo con el debate de investidura del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, como candidato a la Presidencia del Gobierno.
El arzobispo comienza su misiva con la advertencia de una situación «crítica» y de «verdadera emergencia» en España «de cara a su futuro». «Muchísimo va a depender de lo que suceda estos días. Lo que digo no es ni retórica ni dramatismo estéril. Es así y no hay que darle vuelta», señala, antes re insistir en que es una «hora crucial y de emergencia».
A continuación, el cardenal explica que la semana pasada habló «con un señor muy importante de España, de gran sabiduría, lucidez y experiencia», al que Cañizares le preguntó qué deben hacer los cristianos y «qué cabe aconsejar a la Iglesia en los momentos que vivimos en este Año que acabamos de comenzar».
Según Cañizares, «este señor muy importante de España» respondió que «sea Iglesia» y «anuncie y testimonie a Jesucristo, en obras y palabras», a fin de «construir un mundo nuevo con hombres y mujeres nuevos, con mentalidad nueva, una España nueva, que esto cambiará el mundo» y a España.
En este sentido, el arzobispo defiende que harían «muy bien todos los cristianos valencianos» en «ahondar, reavivar y fortalecer el conocimiento de Dios». De igual forma, insta a los sacerdotes a «afianzar este conocimiento a través del estudio sosegado» para «predicar a Dios con palabras nuevas y vigorosas».
Cañizares señala que, por su parte, «en medio del silencio de Dios que lacera nuestro mundo y nuestra cultura», hará «resonar públicamente» y «con todos los medios» a su alcance la «palabra sobre Dios», para pedir que «centremos toda nuestra vida en Él, porque en Él está la dicha y la salvación».
El cardenal «invita» a sacerdotes y fieles a «escuchar en lo hondo del alma la llamada de Dios». «Si la pregunta ‘¿dónde está tu Dios?’ que nos dirige una cultura despojada de la fe y unos acontecimientos que nos llenan de incertidumbre llega a inquietarnos demasiado, ¿no será porque hablamos poco con Dios?», se pregunta, para llamar a rezar «con perseverancia».
«De rodillas ante todos»
Con todo, pide que en 2020, y ante «la coyuntura concreta que vivimos en España», los cristianos «aviven» su «vida de oración». «Pocas veces mejor que pensar en la oración, como al comienzo de un año nuevo, y en estos precisos apremiantes momentos en que se nos abren tantas expectativas, se agolpan tantas necesidades, se ponen ante nosotros tantas inquietudes, sufrimientos, gozos y esperanzas, y nos vemos como impulsados a levantar nuestros ojos a Dios en súplica esperanzada», añade.
Cañizares advierte que «ni la renovación y fortalecimiento de la Iglesia, ni la renovación y edificación de España serán posibles si no oramos». Por ello, en su carta se pone «de rodillas ante todos» para pedir que a partir de este sábado y «en los días sucesivos mientras no se aclare el futuro incierto» del país, «en todas las iglesias se ore por España, que se eleven oraciones especiales por España».
A su juicio, «la situación urge y apremia». Así, asegura que su «invitación a orar» es el «mensaje más esencial, máxime en estos tiempos de secularización y de eclipse de Dios». «Es la oración la garantía de humanización de nuestro mundo, de nuestra España porque es la garantía de la recuperación de lo humano y del bien común que solo en Dios encuentra su fundamento y su verdad», añade el arzobispo de Valencia.