Bruselas, más pesimista con la economía española

La Comisión Europea (CE) ha empeorado en medio punto sus previsiones de contracción de la economía española este año hasta el -3,7%, desde el -3,2% previo. Estas nuevas proyecciones se ajustan a las del Gobierno, que estima que el PIB decrezca un -3,6% en 2009.

> La Comisión Europea (CE) ha empeorado en medio punto sus previsiones de contracción de la economía española este año hasta el -3,7%, desde el -3,2% previo. Estas nuevas proyecciones se ajustan a las del Gobierno, que estima que el PIB decrezca un -3,6% en 2009.

> En la presentación de las nuevas previsiones del Ejecutivo comunitario, el comisario de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, afirmó que España atraviesa una recesión “menos profunda que la media europea pero más larga”,

De hecho, hizo hincapié en que la contracción es inferior a la del 4% pronosticada para la media de los países del euro y los Veintisiete, para los que ha mantenido invariables sus proyecciones. Las razones del retraso de España hay que buscarlas, según Bruselas, en la lentitud que está mostrando la economía española para absorber el excesivo peso del ladrillo, el alto endeudamiento de los hogares, el déficit y una alta dependencia de la financiación exterior.

Una situación que, tal y como añade el Ejecutivo comunitario, se verá agravada a lo largo del presente ejercicio por la aceleración en la destrucción de empleo que ha tenido lugar durante la primera mitad del año y que se traducirá en un mayor recorte del consumo, el gasto privado y la inversión.

Respecto al mercado laboral, Bruselas afirma que la destrucción de empleo en España se irá moderando en los próximos meses en base al abaratamiento del crédito, la mejora de la confianza de los consumidores y el aumento de la afiliación en los meses de julio y agosto.

En contraste, el Ejecutivo comunitario revisó al alza las previsiones de crecimiento para Francia y Alemania, aunque entre las grandes potencias de la Unión Europea, sólo el país vecino registrará una contracción inferior a la de España: decrecerá un 2,1%, según las previsiones de Bruselas, frente a la anterior estimación del -3%. Mientras el PIB de la denominada ‘locomotora de Europa’ se contraerá un 5,1%, en lugar de un 5,4% estimado inicialmente. Ambas potencias salieron de la recesión en el segundo trimestre del año.

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