El gobernador del Banco de España, Luis María Linde, ha admitido que a la reforma financiera del ministro Luis de Guindos aún le quedan algunos flecos, razón por la cual el Ejecutivo podría solicitar una prórroga del rescate. “Cuando pensamos en si se precisarán posibles necesidades adicionales de provisiones, estamos hablando de las entidades que están bajo control del Estado”, ha reconocido Linde en una entrevista a Bloomberg.
“No esperamos que esos bancos vayan a necesitar una nueva inyección de capital, pero tenemos que esperar hasta septiembre para ver cómo evoluciona la economía y los resultados de las entidades”, añadió.
Según publica la agencia Europa Press, Linde se ha referido así a la posibilidad de prorrogar el plazo del Memorando de Entendimiento (MoU) suscrito con Bruselas, que expira el próximo 31 de diciembre, para poder recurrir a los recursos facilitados. La Comisión Europea puso a disposición de la banca española una línea de crédito de hasta 100.000 millones de euros, de los que España ha empleado 41.300 millones.
“El Gobierno tendrá que tomar esa decisión, y supongo que será en octubre”, ha dicho Linde en el marco de la Conferencia Económica de Montreal, aunque ha rechazado expresar su opinión sobre el asunto.
Los inspectores de la Troika avisaron la semana pasada de que, aunque el programa para la banca española “está en el buen camino”, persisten “riesgos” debido a la situación económica y a que el ajuste en el sector de la vivienda no ha terminado, por lo que reclamaron extremar la “vigilancia”.
Asimismo, el gobernador del Banco de España ha subrayado que es importante para el Gobierno español vender CatanlunyaCaixa y Novagalicia, si bien ha resaltado que “han de ser bien vendidos”, sin dar más detalles al respecto.
“El Estado español no tiene intención alguna de retener los bancos. No quiere bancos públicos”, ha remachado Linde.