Banco de Valencia y sindicatos han cerrado esta madrugada un preacuerdo sobre el expediente de regulación de empleo (ERE) que afectará a 795 empleados, de los cuales 231 serán por prejubilaciones a partir de los 53 años y el resto (564), bajas indemnizadas.
En el caso de las bajas incentivadas, el preacuerdo contempla una indemnización de 30 días por año trabajado, con límites de 24 meses para los menores de 50 años y de 36 para los mayores de esa edad. La fecha de efecto tanto para las prejubilaciones como para las bajas indemnizadas comprende desde el 1 de marzo hasta el 31 de diciembre de este año. Estas cantidades se incrementarán con un complemento que incentive la voluntariedad, según ha señalado Comfia-CCOO en un comunicado.
Además, se contempla un plan de prejubilaciones para los empleados entre los 60 y 52 años. La compensación será de un 80% del salario anual neto para los nacidos entre 1957 y 1960, y de un 85% para los nacidos de 1953 a 1957.
El acuerdo conlleva la desconvocatoria de la huelga prevista para mañana.
Banco de Valencia comenzó la negociación del ajuste laboral el pasado 15 de enero a partir de unas cifras iniciales de 890 despidos, cerca del 60% de la plantilla, sobre un total de 1.613 trabajadores.
Éste es el segundo expediente de regulación de empleo que la entidad aplica en dos años, después de que en 2012 despidiera a 360 trabajadores y salieran de la entidad más de doscientos mayores de 58,5 años.