El ministro de Industria, Turismo y Energía, José Manuel Soria, ha anunciado este martes en Valencia que su departamento «frenará» la puesta en marcha de infraestructuras gasísticas como el almacén submarino Castor, operador por ACS y Escal y situado frente a la costa de Vinaròs (Castellón), para no incrementar la tarifa del gas natural.
Así lo ha señalado en declaraciones a los periodistas antes de clausurar la asamblea general de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), preguntado por el sobrecoste de ese proyecto y el posible impacto de su puesta en marcha en la factura del gas.
Esta instalación ha disparado su coste hasta los 1.300 millones cuando estaba presupuestada tan sólo en 500 millones de euros.
Al respecto, ha aludido a la «sobrecapacidad de infraestructura gasística» existente en España, a raíz de la coincidencia del «incremento paulatino en el volumen y número de infraestructuras» previsto en la planificación realizada en 2005 con «un momento de caída de la actividad, de la demanda», como el actual.
De hecho, según las estimaciones del Ministerio, en este momento el grado de utilización de esas gasificadoras, gasoductos y almacenes subterráneos de gas «está por debajo del 50 por ciento».
Los promotores del proyecto admitieron en febrero un encarecimiento en un 9,3% respecto al coste comunicado en diciembre de 2007, aunque remarcaron que «el incremento es del 1,1%» en realidad porque el IPC ha subido un 8,2 por ciento en esos cuatro años.