El portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, ha propuesto que la Xunta nombre a los representantes que le corresponden al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) en el consejo de administración de NGC Banco.
Vázquez ha pedido igualmente que la Xunta haga “un esfuerzo final” para que al menos el 51% queda en manos gallegas, sumando un 15% en manos de la propia caja, y un 36% de aportación del propio Ejecutivo autonómico y la de inversores privados «interesados en mantener la galleguidad».
Para el responsable del BNG, la creación de NCG Banco muestra la «incapacidad de los gestores de Novacaixagalicia y, sobre todo, del Gobierno del PP y de Feijóo». Se ha referido a la situación en el País Vasco, donde las cajas fusionadas controlarán, al menos, el 51% del nuevo banco.
También ha hecho hincapié en que la catalana La Caixa tiene el 81% de Caixa Bank, y ha señalado que «la excepción catalana» se produjo porque, tras la publicación del decreto de reforzamiento del sistema financiero, el Gobierno central permitió a los proyectos de Catalunya Caixa y Unnim inyectar más fondos del FROB (ambas entidades maniobraron para tratar de lograr más dinero prestado del FROB, pero finalmente el fondo entrará en su capital).
En cambio, ha considerado que, desde la publicación del decreto que establecía un capital principal mínimo del 10% para las entidades financieras, Feijóo «tiró la toalla». El resultado es «una mala noticia» para Galicia, pues no mantiene el control del banco y la obra social será como la actual.