Citigroup cree que el endeudamiento de las autonomías constituye el gran problema de la economía española. En un informe remitido a sus clientes tras la reunión de los tiburones de Wall Street con José Luis Rodríguez Zapatero, el banco afirma que está de acuerdo con la idea de que el Gobierno central alcanzará las metas del déficit este año, aunque duda de la capacidad de Ejecutivos regionales.
La deuda de las autonomías aumentó un 26,5% en el segundo trimestre del año en comparación con el mismo periodo de 2009, tras registrar 104.083 millones de euros (el 9,8% del PIB), la cifra más alta de toda la serie histórica, según los datos del Banco de España. En este escenario, el banco estadounidense cree que para cumplir los objetivos de reducción del déficit del próximo año (6% del PIB para el conjunto de las Administraciones Públicas) habrá que aplicar medidas de ajuste adicionales y contundentes, si bien estudiará el borrador de los presupuestos de 2011 para ofrecer un análisis más concreto del futuro. Por el momento, parece que los especuladores financieros han dado una tregua a España. Fuentes del sector de los fondos de alto riesgo han confirmado a EL BOLETÍN que en las últimas semanas han observado una estabilización en los mercados de deuda de la eurozona. Esta es la forma de transmitir al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que su visita a Nueva York -en donde se ha reunido con diversos gigantes de inversión- ha servido para, tal y como él pretendía, tranquilizar a los inversores. O al menos, apaciguarlos. “No obstante, y como bien indica Zapatero [en la entrevista concedida a The Wall Street Journal], aún hay países como Portugal o Irlanda, que tienen que recobrar la confianza de los inversores implantando más medidas”, matizó una de las fuentes consultadas. Otro analista cercano a la industria de los temidos ‘hedge funds’ resumió la situación de la región con una comparación médica: “La herida ya no sangra, aunque no esté del todo curada”.
Durante la reunión de Zapatero con los grandes inversores de Wall Street, El presidente desgranó las medidas de ajuste y las reformas estructurales adoptadas por el Gobierno: la reducción del 5% en los salarios públicos, la reforma laboral, el recorte de las inversiones, la congelación de las pensiones y, a medio plazo, la reforma del sistema de pensiones para prolongar la edad de jubilación y garantizar la sostenibilidad del sistema.
Zapatero subrayó que la deuda española (parte de ella en manos de fondos gestionados por algunos de los asistentes) está 20 puntos por debajo de la media de la UE, pero reconoció que el déficit público superó el año pasado el 11% del PIB, que se comprometió a reducir al 3% en 2013 para cumplir las exigencias de Bruselas.