La nueva dirección del grupo Marsans, controlado actualmente por Posibilitum Business, sociedad del empresario Ángel de Cabo, después de que el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y su socio Gonzalo Pascual vendieran hace diez días la sociedad, calcula que tendrá que despedir al 43% de la plantilla, lo que supone prescindir de entre 600 a 900 empleados de los 2.079 trabajadores que tiene actualmente la empresa.
Esta medida, entra dentro del plan de viabilidad de la compañía, cuyo objetivo es, según un comunicado de la empresa, “activar las ventas y recuperar la actividad comercial”. La cúpula directiva de Marsans ha informado hoy de esta decisión al comité de empresa de los trabajadores, donde además se han presentado otras iniciativas previstas por el grupo para que “viajes Marsans sea una empresa viable”.
Asimismo, en el citado comunicado, también se encuentra la intención de la compañía de volver a emitir billetes de avión. Según Marsans, el grupo ha estado manteniendo “contactos” con la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) y “no descarta alcanzar un acuerdo”. También asegura que ha mantenido reuniones con distintos touroperadores que están dispuestos a trabajar con ellos.
Además de este recorte de personal, Posibilitum ha afirmado que también va a eliminar “los puntos de venta no estratégicos” y reducirá los costes y gastos generales. También ha confirmado la posible venta de algunos activos de Marsans, pero afirma que tratará “de maximizar el valor de los activos que se vendan, evitando operaciones a cualquier precio”.
Hace una semana, el ex propietario de Marsans, Gerardo Díaz Ferrán aseguraba que los trabajadores no tenían “por qué estar preocupados”, ya que De Cabo sacaría ambas empresas adelante. Aún así, los casi 3.000 trabajadores de la empresa mostraron sus dudas ante esta venta ya que el traspaso se realizaba a una entidad sin experiencia en el sector turístico.