¿Qué utilidad tienen los créditos rápidos?

Las entidades bancarias no son todo lo flexibles que nos gustaría. Eso supone que no puedan tomar decisiones con la rapidez que se requiere en determinadas situaciones. Es muy posible que estés buscando alguna alternativa de financiación y te hayas topado con la posibilidad de recibir un préstamo relativamente pequeño y en un plazo de tiempo muy breve, a menudo 24 a 48 horas. Ahora bien, muy probablemente te preguntarás ¿cuál es la utilidad de los créditos rápidos? Después de todo, ya existe un mercado bancario que ofrece préstamos personales.

La realidad es que las entidades bancarias no son todo lo flexibles que nos gustaría. Eso supone que no puedan tomar decisiones con la rapidez que se requiere en determinadas situaciones. Además, las condiciones para su autorización, así como los trámites posteriores reducen mucho la utilidad de los préstamos personales.

Es por ese motivo que los créditos rápidos han adquirido una considerable notoriedad con el paso del tiempo. La ausencia de trámites y papeleo, así como la rapidez en la que el importe solicitado llega a la cuenta son dos de las principales ventajas de estos préstamos exprés.

Ahora bien, como cualquier otra herramientas de financiación, su uso está más indicado para un determinado propósito que para otro. Hemos consultado a los creadores de la página dinerorapidonline.com, especializada en préstamos rápidos y minicréditos, para que nos detallen los requisitos y utilidades de este tipo de financiación urgente.

¿Cuáles son los requisitos para sacarle utilidad a un crédito rápido?

Gastos pequeños
Debe tratarse de un gasto pequeño o relativamente pequeño: Los elevados intereses que se pagan tendrían un efecto devastador sobre nuestra economía si solicitamos importes demasiado elevados.

Situación urgente
Debe ser una situación de urgente necesidad que no admita demora alguna. En el caso de que se disponga del tiempo suficiente, siempre será mejor contratar un préstamo personal.

Prescindir de papeleo
Debe prescindirse de la mayor cantidad de papeleo posible, de lo contrario podría terminar por implicar las mismas molestias que cualquier otro préstamo.

No hay más alternativas
Debe tratarse de la última alternativa. Puede que no dispongamos de aval alguno, nómina o pensión, o incluso figuremos en un registro de morosos, tales como ASNEF o RAI. Sólo en esos casos está justificada la contratación de un préstamo rápido.

¿A qué finalidad debes destinar los créditos rápidos?

Existen muchísimos supuestos en los cuales pueden reunirse las características indicadas anteriormente. No obstante, en este apartado vamos a intentar aludir a los más frecuentes:

Multas:
Las multas son siempre algo totalmente inesperado y para lo que no se tenía previsto ningún consumo concreto. Por ese motivo, dependiendo del momento del mes en que nos llegue la multa, podríamos vernos son liquidez suficiente para saldarla y sin posibilidad de saldarla por otras vías.

Además, las multas de tráfico suelen reducir su importe a la mitad si se pagan antes de 20 días, por lo que pedir un minicrédito para pagarlas es más barato que esperar y pagar la totalidad del importe.

Averías domésticas o en el vehículo
Cuando menos te lo esperas, el coche sufre una avería o el frigorífico deja de funcionar. Si este tipo de bienes ya contaban con cierta edad y trayectoria de uso, lo más recomendable es ir ahorrando una determinada cantidad de dinero. Pero ¿qué hay del resto de casos? Si el periodo de garantía ha expirado pero aún le quedan años de rodaje al vehículo o al electrodoméstico, lo último que queremos es encontrarnos con una avería, la cual siempre sobreviene en el momento más inoportuno.

Por supuesto, esto es ampliable a cualquier tipo de imprevisto en el hogar, del cual se derive la necesidad de hacer algún tipo de reparación o restauración, como pueda ser la aparición de humedades, una avería eléctrica, etc.

Gastos extraordinarios de la comunidad
Cuando menos te lo esperas, llega el momento de pagar una derrama de la comunidad. De nuevo nos encontramos con un gasto que no forma parte del día a día y, por tanto, no puede ser previsto con la misma facilidad. Para estos casos, los préstamos rápidos pueden ser una alternativa.

Necesidad de acudir al dentista
Si bien muchos cuidados médicos están cubiertos por la seguridad social, lo cierto es que hay unas cuantas excepciones para las cuales será necesario pagar su totalidad con nuestros propios recursos. En el caso de que una caries amenace con perforarte una muela, no puedes permitirte el lujo de dejarlo pasar. Dado que suele ser un fenómeno imprevisto, podrías encontrarte en la necesidad de pedir un préstamo rápido.

¿Cuándo no son útiles los créditos rápidos?

Con independencia de que pueda tratarse de gastos reducidos, hay un conjunto de casos en los que un crédito rápido no debería ser solicitado, pese a que pueda resultar cómodo y rápido. Fundamentalmente, se trata de todo el conjunto de gastos ligados a una compra que no sea totalmente imprescindible. Entre estos supuestos se encuentran todos los que se refieren a las compras compulsivas, vacaciones, viajes de placer, ocio en general y demás caprichos.

Debes tener en cuenta que todas esas compras o gastos no representan una verdadera necesidad en tu vida. Por lo tanto, jamás deberían ser la causa de que te endeudes, mucho menos utilizando herramientas como los créditos rápidos. La velocidad con la que adquieres los fondos nunca debería ser motivo suficiente para justificar el gasto, si éste no es realmente urgente e ineludible.

Muy a menudo, se ofrecen este tipo de préstamos como mecanismos para conseguir una rápida satisfacción de tus deseos, obviando el hecho de que también deben devolverse con la misma rapidez. De lo contrario, terminarás pagando un coste considerablemente elevado por algo que, al fin y al cabo, tan sólo era un capricho que podrías haber satisfecho un tiempo después mediante un ahorro bien planificado.

Como has podido comprobar, los créditos rápidos tienen cierta utilidad que conviene ser tenida en cuenta. Después de todo, pueden ayudarnos a salir de un aprieto en un momento dado. Sencillamente, revisa este artículo cada vez que estés planteándote solicitar uno. De esa manera podrás asegurarte de que lo estás empleando de la manera adecuada.

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