Endesa, la más afectada por el modelo energético que proponen los secesionistas catalanes

Energía

Endesa, la más afectada por el modelo energético que proponen los secesionistas catalanes

Oficinas de Endesa

Junts pel Sí ha presentado diez medidas para lograr un nuevo modelo energético en Cataluña. Junts pel Sí, la lista conjunta de Artur Mas y Oriol Junqueras, ha propuesto un nuevo modelo energético para Cataluña, basado en una batería de diez medidas “bastante etéreas” y “focalizadas en el largo plazo”, según señalan los analistas de Ahorro Corporación en un informe en el que destacan que en principio Endesa aparece como la compañía más expuesta a esta incertidumbre, e Iberdrola la menos.

“Las medidas propuestas por Junts pel Si son bastante etéreas, focalizadas en el largo plazo y no dan respuesta a muchísimas cuestiones”, señalan los expertos de Ahorro Corporación, que entre las cuestiones pendientes destacan “cómo se articulará el transporte tanto de gas como electricidad en Cataluña, cuál será la actuación de REE y Enagás, como se fijarán los precios de electricidad y gas, como se regularán las interconexiones con el resto de España, como quedará Gas Natural dentro del esquema previsto, etc”.

En definitiva, “las propuestas de Junts pel Si introducirán más incertidumbre en el mercado y a priori colocarían a Endesa como la empresa más expuesta e Iberdrola como la que menos. Esperaríamos que Gas Natural se viera de una u otra manera beneficiada”, destacan los expertos.

Junts pel Sí ha propuesto diez medidas para lograr un nuevo modelo energético en Cataluña:

Un pacto nacional entre las instituciones y los agentes económicos y sociales para alcanzar en el año 2050 una producción energética 100% renovable.

Abordar la nueva regulación en base a la transposición efectiva y la aplicación rigurosa de las directivas europeas para crear un mercado energético realmente competitivo.

Incorporar al futuro mercado único europeo que tiene el horizonte de fijar el mismo precio de la electricidad en todo el ámbito europeo, considerando la facilidad para Cataluña dado su buen nivel de interconexión a la red europea.

Evitar conflictos de interés entre los diferentes agentes del mercado impulsando la separación jurídica y estructural de las actividades de generación, transporte, distribución y comercialización.

Promover la evolución hacia un sistema eléctrico distribuido, eliminando las barreras de entrada a los pequeños productores, públicos y privados, y favoreciendo el autoconsumo de energía, especialmente de renovables.

Plantear los escenarios adecuados para decidir la política nuclear catalana en el marco de la transición hacia una producción con mayor peso de la energía renovable y la priorización de una economía de bajo carbono, dado que las centrales en territorio catalán cumplirán los 40 años de funcionamiento a mediados de la próxima década.

Promover la eficiencia energética en todos los ámbitos, especialmente en la industria, el transporte y el hogar.

Promover una auditoría pública sobre la legitimidad de los costes de transición a la competencia y del déficit de tarifa que pagan los usuarios de Cataluña.

Establecer los medios para garantizar el acceso a la energía por parte de los ciudadanos que se encuentren en situación de vulnerabilidad económica.

Convertir el Instituto Catalán de la Energía en la Agencia de la Energía de Cataluña, homologable a las agencias públicas europeas en este ámbito.

Más información