Crisis internacional, agudización del bloqueo imperial más un grupo de desaciertos internos han conllevado a una situación crítica en todas las direcciones que ha obligado a las autoridades a elaborar un mega plan donde no ha quedado libre ni un sector del gobierno o actividad cooperativista o privada.
En extremo ambicioso, pero necesario, el plan presentado a los parlamentarios donde Marrero, en hecho inusual en estos casos, se apoyó en algunos apuntes e improvisó su extensa intervención en la que anunció un aumento del pago en electricidad, combustibles y consumo de agua, además de mejoras salariales en educación y en algunas actividades relacionadas con la salud.
Muy comedido, pero crítico, con lógicos planteamientos dibujó un panorama que requerirá de mucha sabiduría y tino en sus actores desde la cúpula hasta la base municipal, justo en instantes donde credibilidad y gobernabilidad no están en sus mejores momentos.
Como aliciente final, el primer ministro aseguró de que en la historia del proceso revolucionario se habían presentado y solucionado momentos también muy críticos.