El jueves por la tarde, el Colegio de Médicos sorprendió anunciado la noticia. La Comisión de Recursos del Icomen determinó que Merina no cumplía con los requisitos estatutarios para ocupar el cargo, específicamente por no ser un médico en activo, condición indispensable según los estatutos del colegio. Un extremo que niega el propio Tomás Merina y Amyts, el sindicato mayoritario de médicos de la región, que asegura que se trata de “un escándalo sin precedentes” y que recuerda que la Junta Electoral verificó el cumplimiento de los requisitos de Merina y proclamó su victoria.
El sindicato acusa al presidente saliente, Manuel Martinez-Sellés —considerado cercano a Isabel Díaz Ayuso— de protagonizar un “atropello democrático” al tratar de “anual la voluntad electoral de los médicos”.
“En Amyts acogemos con gran asombro el atropello democrático y denunciamos las maniobras de Martínez-Sellés para silenciar el voto médico por medio de una Comisión de Recursos que consideramos que se está extralimitando en sus funciones para saltarse a la Junta Electoral y lo que han decidido los compañeros médicos en las urnas, actuando injustamente a favor de Martínez-Sellés en su huida hacia no se sabe dónde”, apuntan en un comunicado.
Martínez-Sellés, presidente en funciones y quien impugnó la candidatura de Merina, ha declarado que no se presentará en las nuevas elecciones por razones éticas, afirmando que «haber perdido las elecciones me inhabilita, al menos moralmente, para aprovechar esta situación y presentarme de nuevo».
Por su parte, Tomás Merina ha calificado la anulación como una «fea maniobra de despacho» y ha anunciado que recurrirá la decisión por vía judicial, asegurando que cumple con todos los requisitos exigidos y que la Junta Electoral validó su candidatura en su momento.
MEDIDAS CAUTELARÍSIMAS
También ha solicitado que la junta Electoral mantenga la decisión de las urnas. Ha interpuesto un recurso de solicitud de medidas cautelarísimas exigiendo seguir adelante con la toma de posesión, suspender la resolución de la Comisión de Recursos y que Martínez-Selles y la Junta Directica se abstengan de seguir anunciando decisiones “para las que no tienen competencias”.
La comunidad médica madrileña espera ahora la convocatoria de nuevas elecciones en un clima de tensión y desconfianza, mientras se cuestiona la transparencia y legalidad de los procesos internos del Icomem.
Con el 47% de los votos (4.475 papeletas), Merina se alzó con la victoria en las elecciones el pasado 17 de diciembre, superando a Esther Rubio, que obtuvo el 27% (2.580 votos), y a Martínez-Sellés, que quedó en última posición con el 25% (2.393 votos).