El organismo ha endurecido las mediadas para evitar irregularidades a la hora de contabilizar los votos. La Unión Europea de Radiodifusión (UER), ha lanzado un mensaje a los países que participaran en el festival d e Eurovisión de este año. Y es que el organismo organizador del espectáculo, ha endurecido las sanciones por irregularidades y ha llegado hasta el punto de expulsar con un máximo de tres años a los países que intenten amañar el concurso.
«Si se detectan irregularidades antes, durante o después del concurso para favorecer a cualquiera de los países participantes, el Grupo de Referencia iniciará automáticamente procesos que conllevarán una sanción para el radiodifusor de hasta tres años», ha explicado la UER en un comunicado.
Asimismo, ha afirmado que esta medida servirá para “reforzar la credibilidad” de las votaciones ante las críticas que surgieron en las ediciones pasadas, como el intento previo de influir en el ‘televoto’ en el festival del año pasado, que a pesar de ello fueron «detectados a tiempo» y no fueron contabilizados.
«Al igual que los clubes de fútbol son, en principio, responsables de la conducta de sus aficionados, haremos responsables -con un seguimiento individual de cada caso- a los radiodifusores para evitar irregularidades en la votación» ha explicado el presidente del Grupo de Referencia, Frank Dieter Freiling.
Asimismo, el supervisor ejecutivo del concurso en nombre de la UER, Jon Ola Sand, ha declarado que “el ganador de la competencia de la canción de Eurovisión es decidido por un jurado profesional y los espectadores en casa, cada uno con una participación del 50% en el resultado. En este concurso no hay lugar para los intentos organizados para influir injustamente en el resultado».
