El documental cuenta la experiencia del ‘convoy’ de mujeres de toda España que viajó a Madrid para manifestarse contra la reforma del aborto impulsada por Gallardón. Hoy se estrena simultáneamente en más de 80 ciudades españolas la película “Yo decido. El tren de la libertad”, un documental que narra la movilización feminista que tuvo lugar el pasado 1 de febrero cuando mujeres de toda España viajaron a Madrid para manifestase contra la restricciones del derecho al aborto que supone la reforma impulsada por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón.
El film -que se estrena justo cuando el Consejo de Ministros parece estar a punto de aprobar la reforma de la ley que regula la interrupción voluntaria del embarazo- cuenta la experiencia de los ciudadanos que dieron vida a esta iniciativa, promovida por dos asociaciones de mujeres asturianas, que movilizó a miles de personas desde todos los rincones del país hasta Madrid, con un objetivo claro: frenar el anteproyecto de ley de Gallardón y exigir que se mantenga vigente la actual ley de de salud sexual y reproductiva y de interrupción voluntaria del embarazo.
El convoy tuvo incluso su propia canción dedicada Gallardón (con la música de El chacachá del tren) que se colocó en las redes sociales y en Youtube para que las manifestantes se aprendieran la letra y se puso a disposición de las participantes un peto a fin de convertir la marcha en una ‘marea violeta’,
La película documental fue una iniciativa de la socióloga y crítica Pilar Aguilar Carrasco y la cineasta Chus Gutiérrez y, tal y como recuerda CCOO, se elaboró con más de 200 horas de grabación en 15 ciudades españolas, 7 extranjeras, y fue realizado por un colectivo diverso de personas, en su gran mayoría mujeres cineastas y de los medios audiovisuales, junto con algunas entidades, plataformas, asociaciones, productoras y empresas del sector, agrupadas bajo el nombre de Colectivo de Mujeres Cineastas Contra la Reforma de la Ley del Aborto.
La cinta fue financiada a través de una cuenta abierta a nombre de la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales (CIMA), ya que como recordaban en su día las promotoras, “aunque todas (productoras, guionistas, sonidistas, montadoras, directoras, etc.) lo hacen gratis y apelando a sus propios medios técnicos y económicos pero, hacer una peli genera gastos” .