En una entrevista a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, ha explicado que su formación considera que la reforma es “poco ambiciosa” pero, ante “el riesgo de que se convirtiera en catástrofe” porque “Otegi, Rufián, el BNG o las Cup metieran sus zarpas”, ha decidido comportarse “con sentido de estado” y apoyar su convalidación.
No se trata de “un apoyo puntual ni no puntual” al Gobierno, ha apuntado Bal, ya que su partido no ha cambiado de estrategia política y seguirá “viendo norma por norma” para analizar si son “buenas” para los ciudadanos españoles.
Asimismo, ha recordado que Ciudadanos ha pedido al Ejecutivo que “no ceda ante las pretensiones de los nacionalistas” y no realice “más concesiones al separatismo y al nacionalismo” ni con la tramitación de este Decreto ley.
“Si se promete alguna cosa, si se cede alguna cosa, si no convalida en el presente y en el futuro punto por punto, coma por coma, este acuerdo entre empresarios y sindicatos, el voto de Cs será que no”, ha advertido. En cambio, si se mantiene la aprobación “íntegra” y no se toca “absolutamente nada”, dará su voto afirmativo “independientemente de qué otros partidos puedan votar afirmativamente”.