Según esta encuesta, las cuotas anuales que pagaron los hogares al centro alcanzaron una media de 1.868 euros por alumno. Sin embargo, esta cifra se acercó a los 3.000 euros en Cataluña (2.832 euros) y la Comunidad de Madrid (2.720 euros), autonomías con el precio más alto en cuotas por estudiante. Por el contrario, las cuotas más bajas en educación no universitaria se abonaron en Extremadura (481 euros) y en las ciudades autónomas de Melilla (288) y Ceuta (66).
Asimismo, el INE apunta que las subvenciones públicas aportaron una media de 2.632 euros por alumno, un 17,3% más que en el curso 2014-2015. Por comunidades autónomas, la subvención media por alumno alcanzó sus mayores cotas en País Vasco (4.174 euros) y Comunidad Foral de Navarra (3.607). Los niveles más bajos se registraron en Comunidad de Madrid (2.138 euros) y Canarias (1.687).
Los ingresos corrientes que percibieron los centros educativos de enseñanza privada se situaron, por su parte, en 12.533 millones de euros (4.621 euros por alumno, frente a los 4.138 del curso 2014-2015). El 57,0% de los ingresos corrientes procedieron de la Administración Pública, el 40,4% de las cuotas pagadas por los hogares y el 2,6% restante de transferencias o de otros ingresos privados (donaciones, pagos de asociaciones de padres, concesiones de servicios…). Esta distribución fue similar a la del curso 2014-2015.
Además, desde el punto de vista de los hogares, la educación privada no universitaria supuso un coste medio en cuotas de enseñanza de 1.421 euros por alumno en el curso 2020-2021. En el caso de la enseñanza privada universitaria fue de 5.604 euros.