Según recuerda el sindicato, ya alertó al inicio de la temporada estival que “los recortes presupuestarios de la Comunidad de Madrid se habían cebado con los permisos del personal, lo que afectaba seriamente a la continuidad de los servicios y no permitía la adecuada planificación”. Una planificación, detalla, “que garantizara una asistencia sanitaria de calidad a los y las pacientes, el descanso del personal, su conciliación familiar y su salud física y mental”.
A esto se suma el cierre de camas y plantas en verano que, en el caso del Hospital La Paz, permanecen hasta el 1 de octubre. En la primera quincena de septiembre las camas cerradas son 382, remarca.
Desde Amyts destacan que “es la misma situación, crónica, de todos los julios y septiembres” y que se resume en que “no se pueden ingresar pacientes por falta de camas”. La planificacion de cierre de camas “no contempla sustituciones por las vacaciones de verano, por tacañería y/o dificultad para encontrar personal por ofertas y condiciones tacañas”, asegura el sindicato médico.
“Todos los años se repite la misma historia, todos los años se deshumaniza el hospital por la Urgencia. No hay derecho. No hay razones”, critica.