CaixaBank gana un 17,8% más pese al impacto por su salida de Repsol

CaixaBank se anotó un beneficio atribuido en 2018 de 1.985 millones, un incremento de un 17,8% respecto al ejercicio anterior, según ha anunciado hoy la entidad que preside Jordi Gual, que ha explicado que detrás de este crecimiento se situaron “la fortaleza de los ingresos core, la mayor aportación de BPI y la reducción de las dotaciones”. Contando solo España, los resultados arrojaron unas ganancias de 1.605 millones, un 6,4% más.

La contribución a resultados del negocio de BPI en Portugal ascendió a 262 millones (104 millones en el ejercicio 2017). Si se tiene en cuenta la aportación de las participadas de BPI, la contribución total del banco portugués asciende a 380 millones (176 millones en el ejercicio 2017). CaixaBank cerró el ejercicio 2018 con una participación del 100% en BPI.

El margen de intereses del grupo ascendió a 4.907 millones, un 3,4% más respecto a 2017, gracias a la mejora de la rentabilidad del crédito, la gestión de la financiación minorista y el ahorro en los costes de la financiación institucional.

Los ingresos por comisiones alcanzaron los 2.583 millones, un 3,4% más respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Aunque bajaron un 2,2% las comisiones bancarias, de valores y otros, las comisiones de fondos de inversión, carteras y sicav’s aumentaron un 12,6% por el incremento del patrimonio gestionado durante los primeros nueve meses del ejercicio, si bien la volatilidad de los mercados incidió negativamente en la evolución del patrimonio en el cuarto trimestre.

Por otra parte, la ratio de eficiencia de CaixaBank se situó en el 52,9%. La ratio de eficiencia core –gastos de explotación recurrentes entre ingresos core– ha mejorado 3,5 puntos porcentuales en los últimos 3 años, hasta el 56,4%.

Venta de Repsol

El negocio de las participaciones contribuyó al grupo con un resultado de 54 millones, impactado por el resultado negativo de 453 millones derivado del acuerdo de venta de la participación del 9,36% que la entidad mantenía en Repsol.

Los ingresos procedentes del total de la cartera de participadas se situron en 972 millones, e incluyen los ingresos por dividendos, básicamente de Telefónica, y los resultados de las entidades valoradas por el método de la participación, como Erste Bank, SegurCaixa Adeslas, BFA y Repsol (sin el impacto de la venta de la participación).

Los resultados de las entidades valoradas por el método de la participación (+57%) vinieron marcados a nivel interanual por la buena evolución de su negocio y por la mayor contribución relacionada con BFA.

La ratio de morosidad se redujo hasta el 4,7% con una tasa de cobertura del 54%. Durante el segundo trimestre de 2018, CaixaBank acordó vender su negocio inmobiliario a una compañía de nueva creación propiedad en un 80% de Lone Star y en un 20% de CaixaBank. Tras la formalización de esta operación y la actividad comercial del año, la cartera de adjudicados netos disponibles para la venta se situaba en 740 millones, un descenso de 5.138 y 4.606 millones en el año y en el trimestre, respectivamente).

En cuanto a la solvencia, la ratio Common Equity Tier 1 (CET1) fully loaded del grupo se situó a 31 de diciembre de 2018 en el 11,5%.

Por último, la rentabilidad (ROTE) mejoró hasta el 9,3%, en línea con el objetivo del Plan Estratégico para 2018 del 9%-11%. El ROTE recurrente del negocio bancario y asegurador alcanzó el 12,3%, con un resultado de 2.199 millones.

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