La reunión mantenida en Washington entre el ministro español Carlos Cuerpo y el representante de Comercio de Estados Unidos, Jamieson Greer, ha dejado claro que ambas partes mantienen abierta la vía del diálogo en relación al actual conflicto arancelario. Según ha indicado Cuerpo, “no estamos en una línea roja” y “hay voluntad de acuerdo por ambas partes”.
El encuentro forma parte del proceso de negociación que pretende reequilibrar las relaciones comerciales transatlánticas en un contexto marcado por los aranceles impuestos durante la administración de Donald Trump. Las conversaciones se inscriben en un marco de 90 días acordado para cerrar un posible acuerdo que beneficie a ambas economías.
La reunión con EEUU: clima constructivo y enfoque multilateral
“Muy constructiva” y “abierta”. Así ha calificado el ministro el tono del encuentro, donde se abordaron los desequilibrios comerciales a nivel global y las vías para corregirlos. Cuerpo transmitió que el embajador Greer no puso sobre la mesa cifras definitivas en materia arancelaria, sino más bien la voluntad de corregir el déficit que EEUU mantiene con diversas regiones, incluida Europa.
“Lo que tenemos que encontrar es una forma de acercarnos a este problema de tal forma que sea en beneficio de todos”, afirmó Cuerpo
La tasa Google y el gasto en defensa, en el radar de EEUU
Aunque de forma superficial, también se trató el tema de los impuestos a los servicios digitales, conocida como tasa Google, una cuestión que ha generado fricciones con la administración estadounidense en los últimos años.
El ministro apuntó que este asunto se mencionó como una “preocupación” para Washington, aunque sin entrar en detalles. “Corresponde a los negociadores técnicos y, en el caso europeo, al comisario Sefcovic avanzar en esos aspectos más concretos”, matizó.
Negociaciones abiertas: aún no se definen los detalles
Carlos Cuerpo insistió en que el proceso se encuentra aún en una fase inicial. “Primero hay que poner un marco detallado sobre la mesa y luego limar las diferencias”, comentó, remarcando la importancia de dar espacio al diálogo para que las negociaciones maduren adecuadamente.
El enfoque, según el ministro, debe ser multilateral y cooperativo, apostando por una resolución que reduzca los desequilibrios comerciales sin recurrir a nuevas tensiones entre socios transatlánticos.