En rueda de prensa desde Bruselas, la portavoz comunitaria Francesca Dalboni, ha evitado poner objeciones a la maniobra del Gobierno tras asegurar que es prerrogativa de los Estados miembros adoptar este tipo de decisiones. Así, ha recordado que los tratados de la UE permiten restringir las libertades de mercado único, como la libertad de establecerse y libre movimiento de capitales, alegando motivos de seguridad pública, según Europa Press.
“Las medidas deben estar justificas y ser proporcionales al objetivo que persiguen”, ha añadido Dalboni, quien ha indicado que las autoridades españolas no tenían obligación de informar previamente al Ejecutivo europeo sobre su decisión.
Después de que Magyar Vagon haya avanzado que llegará a instancias europeas el rechazo del Gobierno de Pedro Sánchez, la Comisión Europea ha asegurado que no tiene de momento noticias de la compañía.
En este sentido, recoge la citada agencia, el portavoz comunitario, Eric Mamer, ha resumido que los principios por los que funciona la UE aparecen recogidos en los tratados y este tipo de decisiones deberán ser supervisadas en última instancia por el Tribunal de Justicia de la UE (TJUE).