Bankinter alcanzó un un beneficio neto de 261,2 millones de euros,y un beneficio antes de impuestos de 357,8 millones, lo que significa crecimientos del 8,4% y del 7,9%, respectivamente, según ha anunciado hoy la entidad.
El margen de intereses cerró junio con 542,9 millones de euros, que suponen un 6,9% más que en el mismo periodo del año pasado. Por lo que se refiere al margen bruto, la cifra se situó en 977,3 millones de euros, un 8,5% más, gracias a la buena aportación de las comisiones, un 7,3% más que en el mismo periodo del año anterior y que suponen ya el 23% del total del margen bruto. Entre estas comisiones destacan las provenientes del negocio de Gestión de Activos: un 12,1% más que en igual periodo de 2017.
En cuanto al margen de explotación, concluyó el semestre en 474 millones de euros, con un 10,2% de incremento, y ello pese a un crecimiento en los gastos del periodo. No obstante, la buena evolución de los ingresos llevó a una mejora del ratio de eficiencia de la actividad bancaria con amortizaciones, que se situó en el 46,1% frente al 48,5% con el que se cerró junio de 2017.
Entre las ratios más destacadas de estos resultados siguió estando el ROE, o rentabilidad sobre el capital invertido, que se situó en el 13%, lo que supone que Bankinter sigue presentando una rentabilidad en posiciones de liderazgo sectorial, según ha destacado la entidad.
La tasa de morosidad cayó hasta el 3,25% desde el 3,74% de hace un año. Y teniendo en cuenta solo el negocio en España, se situó por primera vez en mucho tiempo por debajo del 3%, en concreto en el 2,92%, menos de la mitad que la media sectorial.
En cuanto a la solvencia, se mantiuvo por encima de las exigencias regulatorias: con una ratio de capital CET1 fully loaded del 11,55%, 24 puntos básicos por encima del nivel de hace un año, y 9 más que al final de 2017.