No obstante, el índice PMI de producción manufacturera de la eurozona registró en marzo su mejor lectura en 11 meses, aunque todavía en territorio recesivo, con 47,1 puntos, frente a los 46,6 del mes anterior.
Asimismo, en marzo también se observó una desaceleración más lenta en el caso de los nuevos pedidos, cuyo ritmo de declive disminuyó por quinto mes consecutivo. En este sentido, un menor lastre de los mercados internacionales contribuyó a frenar la caída de la demanda manufacturera de la zona euro, ya que las ventas de exportación cayeron al ritmo más débil en casi dos años.
De su lado, los fabricantes de la zona euro registraron en marzo otro mes más de caída de los costes de los insumos, mientras que la caída de los precios de venta fue la más rápida desde noviembre de 2023, recoge Europa Press.