Según el IPOD del mes de noviembre, el pago medio por los alimentos es casi cinco veces más que lo que cuesta producirlos en origen. En concreto, 4,53 veces más. Respecto al índice relativo solo a los productos agrícolas, el dato es de 5,01; mientras que el ganadero es de 2,75.
El ajo es el alimento con mayor diferencia porcentual entre el precio del campo y el del supermercado: el 880%. De esta manera, se paga a 0,61 euros el kilo en su origen, que se eleva hasta los 9,80 en la tienda. Por detrás, la uva de mesa, con un 684%. En este caso, el precio pasa del 0,67 al 7,84.
Asimismo, la naranja cuesta en el súper 7,33 euros frente a los 0,24 que se pagan a los agricultores, una diferencia del 6,33%. Las mandarinas (574%), la lechuga y la acelga (539% ambas) o la aceituna de mesa copan el mencionado índice de precios del sindicato COAG.