El Boletín Oficial del Estado (BOE) recoge hoy la modificación del Convenio entre España y Bélgica contra la doble imposición y para prevenir el fraude fiscal en impuestos sobre la renta y el patrimonio. Sustituye al firmado en 2009, que a su vez reformaba el que se acordó en 1995, y elimina la posibilidad de recurrir al secreto bancario para no responder a un requerimiento de información tributaria de las autoridades de ambos países.
Además, explicita expresamente las subdivisiones políticas y niveles locales belgas.
Este acuerdo fue firmado en abril por el equipo de Mariano Rajoy, que en su momento defendió que la reforma profundizaría en la lucha contra la elusión fiscal internacional y ayudaría a reducir la opacidad fiscal por acuerdos de intercambio de información.
De esta manera, el artículo 26 de ese pacto, sobre “intercambio de información”, dispone ahora que las autoridades españolas y belgas “intercambiarán la información que previsiblemente pueda resultar de interés para aplicar lo dispuesto en el presente Convenio o para la administración o la aplicación del Derecho interno relativo a los impuestos de cualquier naturaleza o denominación exigibles en nombre de los Estados contratantes, o de sus subdivisiones políticas o entidades locales”.