La euforia por las medidas del BCE encuentra continuidad en Banco Popular. Alzas próximas al 5% en Bolsa gracias a los piropos de Société Générale y JP Morgan. Un valor financiero esquiva el retroceso que domina el sector tras el rally de la semana pasada. Entre piropos de varias casas de análisis internacional, Banco Popular llega a apuntarse alzas del 4,7%. El rebote a contracorriente lo coloca al frente de un Ibex 35 que a duras penas lucha por aguantar del lado de las ganancias.
En los cruces más alcistas de la sesión, cada una de las acciones del Popular ha llegado a comprarse a 5,46 euros. Un empuje al alza que se suma al que en las últimas jornadas ha facilitado el paso al frente del Banco Central Europeo (BCE) para facilitar el regreso del crédito y la liquidez en el sistema bancario de la moneda única. Esta vez, mientras sus compañeros de negocio y parqué consolidan la euforia de estos anuncios, Société Générale y JP Morgan han salido en apoyo del presidido por Ángel Ron.
Desde los mostradores de la entidad francesa han apostado por recomendar la compra de acciones del español, para las que han fijado un precio objetivo de 6,60 euros unitarios. Una cota que supera las marcadas en los cruces más eufóricos de este lunes en nada menos que un 22%. Por su parte, los estadounidenses de JP Morgan han subido de una sola tacada su consejo de neutral a sobreponderar. Más cautos, pero igualmente optimistas, han engordado su precio objetivo de los 5,23 a 5,9 euros por acción.
Ambas mejoras de consejo llegan apenas unos días después de conocerse que un nuevo inversor insigne ha entrado en el capital de Banco Popular. El jueves pasado, el fondo escocés Baillie Gifford se descubría como titular de un 3,02% de las acciones de la entidad española. Fuentes financieras explicaron que para formar el paquete del que informó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el fondo llevaba incrementando cartera durante los últimos dos años.
Este lunes, el volumen de negociación en el Popular se adelantaba ligeramente a su media anual al ecuador de la sesión, cuando ya habían cambiado de manos más de 17 millones de sus acciones. Entre los gestores que apostaban por las compras en términos de saldo neto operativo, Merrill Lynch y Deutsche Bank llevaban la voz cantante. Del otro lado, las ventas las lideraba el bróker del propio banco.
