Excelente. Esa es la calificación crediticia que acaba de revalidar Grupo Catalana Occidente en medio de una Bolsa española en la que las notas solventes son cada vez más atípicas. AM Best ha confirmado su nota ‘A’ para la aseguradora y el respaldo inversor se ha traducido en alzas del 2% para sus acciones.
La agencia de calificación británica ha optado además por mantener estable su perspectiva sobre el holgado ‘rating’ de Catalana Occidente y sus principales filiales operativas. Una circunstancia que disipa las dudas en torno a un posible recorte de nota a la vuelta de la esquina, como la que sí pesa sobre otras entidades financieras españolas por parte de varias agencias internacionales.
En su informe, AM Best destaca que prevé que la capitalización ajustada al riesgo asumido por la catalana “se mantenga en cotas excelentes, tanto a escala consolidada como individualmente en las subsidiarias”. Además, apunta que en el caso de Atradius -la principal filial del grupo- seguirá gozando de una “robusta generación de beneficio” gracias, entre otras cosas, a su “cauta aproximación al crecimiento” y su ya consolidada diversificación internacional.
Unos elogios a los que los inversores han respondido extendiendo sus compras sobre el valor por segunda sesión consecutiva. Ya ayer, cuando se conocía la confirmación de nota a media jornada, el volumen se disparaba en Catalana Occidente hasta su volumen más abultado en los últimos diez días. Al ecuador de este viernes ya se habían movido acciones en línea con sus sesiones más activas.
Entre los gestores más activos sobre la aseguradora catalana, en compras destacaban las posiciones de Banco Espírito Santo, Deutsche Bank y UBS. Por su parte, los de Interdin Bolsa y Morgan Stanley ponían más empeño en el lado vendedor de la ventanilla. El primero de ellos se desprendía de más de 15.000 acciones en términos netos, casi duplicando el volumen del bróker estadounidense.
AM Best ya había mostrado recientemente su gusto por el mercado de seguros español. En un informe destacaba que “resiste a la presión económica mientras las aseguradoras continúan siendo rentables”. Es más, mientras entran en vigor las exigencias de Solvencia III para el sector, destaca que “los indicadores financieros de los aseguradores españoles son más robustos que los de muchos otros mercados europeos”.