Se acerca la fiesta del Orgullo Gay en Madrid, uno de los mayores quebraderos de cabeza de la alcaldesa Ana Botella, que está decidida a poner coto a esta celebración, recortando el recorrido de su tradicional manifestación e incluso, este año, la ha sacado de Gran Vía.
La marcha, que tendrá lugar el 6 de julio, comenzará en Atocha, subirá por Paseo del Prado y finalizará en la Puerta de Alcalá.
Y es que parece que Botella ha emprendido una cruzada contra el colectivo gay y pone cada vez más impedimentos a la fiesta que cada año atrae a miles de turistas de todo el mundo a la capital.
Sus planes, sin embargo, podrían fracasar. En algunos corrillos se comenta, no sin cierta sorna, que el proyecto de la alcaldesa podría acabar desparramado por la calle Serrano. Y es que en la ‘Milla de Oro’ residen dos ilustres homosexuales declarados: los embajadores de EEUU y Francia.