Los trabajadores de los Registros Civiles no van a quedarse de brazos cruzados mientras Alberto Ruiz-Gallardón y Mariano Rajoy privatizan este servicio para dárselo a los registradores de la propiedad. Hoy mismo se movilizarán contra esta medida concentrándose ante el Registro Civil central y en el Registro número 1 de Madrid para denunciar los “intereses ocultos” del ministro de Justicia y del presidente del Gobierno, al que acusan de ‘buscar trabajo’ a sus colegas, que han perdido ganancias por el estallido de la burbuja inmobiliaria.
Las protestas, convocadas por CCOO y la Plataforma Sindical Unitaria de la Administración de Justicia, se llevarán a cabo a las 10:30 horas frente al Registro Civil central (Plaza de Jacinto Benavente, 3) y a las 11:30 en el Registro número 1 (Pradillo, 66). Unas movilizaciones que, según ha indicado el sindicato, se han organizado “en defensa de los registros civiles, de los derechos de la ciudadanía y del empleo público”.
CCOO quiere denunciar así el anteproyecto de atribución de los Registros Civiles a los registradores de la propiedad que orquesta el Gobierno, y reclama que “el Registro Civil siga siendo un servicio público servido por personal de la Administración de Justicia”.
Asimismo, el sindicato exige al Ministerio de Justicia “toda la verdad en relación con la resolución de los expedientes de nacionalidad por los registradores de la propiedad en el segundo semestre del año 2012”. CCOO denuncia que “frente al supuesto éxito de dicha encomienda, la misma fue forzada por la inactividad del propio Ministerio de Justicia, que en el primer semestre del año 2012 resolvió un 65% menos de expedientes de nacionalidad respecto al segundo semestre del año 2011”.
Es más, asevera que “en miles de expedientes se está requiriendo a los solicitantes de la nacionalidad, a través de los Registros Civiles, para que aporten documentos ya correctamente aportados y que se estiman incorrectos por errores en las instrucciones dadas por el Ministerio de Justicia a los registradores de la propiedad para su revisión”.
Algo que, según CCOO, incrementa “exponencialmente respecto a los años anteriores el número de expedientes supuestamente incompletos, lo que retrasa la concesión de la nacionalidad española y carga a los Registros Civiles con un trabajo innecesario”.