La prima de riesgo italiana ha caído hasta los 271 puntos básicos este mediodía a la espera de conocer los primeros resultados sobre las elecciones que celebra el país. La Bolsa de Milán, mientras, registraba una subida del 1,9 %. Así, todo parece indicar que los mercados confían en una derrota de Silvio Berlusconi, que se posicionaba como enemigo de Alemania.
Aunque todavía queda más de una hora para el cierre de los colegios electorales, y a pesar de la falta de sondeos a pie de urna, los inversores internacionales parecen fiarse de las últimas encuestas y esperan que el progresista Pier Luigi Bersani consiga la victoria. Es probable que Bersani pacte, para consolidar su gobierno, con el tecnócrata Mario Monti.
Hay cuatro candidatos a gobernar el país: el ex primer ministro Silvio Berlusconi, el tecnócrata Mario Monti, el progresista Pier Luigi Bersani y el cómico ‘antisistema’ Beppe Grillo. Los mercados han observado con temor la subida de popularidad del primero -Berlusconi- y el último -Grillo- por su discurso euroescéptico y contrario al euro y a las reformas que exige Alemania.
El favorito de las encuestas ha sido en todo momento Bersani, que aun siendo crítico con algunos de los recortes que pide Berlín, parece dispuesto a mantener a Italia en el euro y a reducir el déficit público. También podría pactar con Monti, quien ha gobernado el país durante el último año y medio. No obstante, hasta la semana pasada existían cinco millones de votantes indecisos que podrían haber alterado las hipótesis de esas encuestas.
