La tragedia del Madrid Arena, en la que fallecieron cuatro jóvenes, ha protagonizado los discursos que han realizado la alcaldesa Ana Botella, y el cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, en la Misa de la Almudena, la patrona de la capital del Estado, celebrada esta mañana. Un suceso ante el que “urge una verdadera conversión dela ciudadanía”, ha asegurado el presidente de la Conferencia Episcopal.
La muerte de Rocío, Cristina, Katia y Belén el pasado Hallooween ha estado muy presente en la celebración de la patrona de Madrid en la Catedral de La Almudena. En su primer discurso para renovar el voto de la Villa de Madrid, Ana Botella, que aseguró ayer “no arrepentirse” de su viaje a Portugal en medio de esta tragedia, ha pedido a la Virgen que ayude a sobrellevar el dolor de la ausencia de estas cuatro jóvenes que sienten las familias.
Un “dolor” que para la regidora de la capital siente “como propio” al ser ella también madre, según ha señalado Botella.
Antonio María Rouco Varela también ha querido tener un recuerda para las víctimas de esta tragedia y ha asegurado que este suceso muestra la urgencia de una “verdadera conversión” de la ciudadanía madrileña. Asimismo, ha recordado la Jornada Mundial de la Juventud que trajo a la capital del Estado al Papa Benedicto XVI y que escenifica el “buen camino de la pastoral juvenil” a seguir.
Además de este recuerdo, Botella no ha querido terminar su primer discurso ante la patrona de Madrid sin mencionar la figura de las víctimas del terrorismo. Así, ha mostrado su “gratitud” hacia “todos los que dan su vida por España. En especial, a las víctimas” de la banda terrorista ETA.