Los estudiantes valencianos no están dispuestos a seguir tolerando los recortes educativos de la Generalitat. Por ello, han lanzado un nuevo pulso al presidente Alberto Fabra con la amenaza de ocupar dos universidades de la región tras la manifestación que han convocado este miércoles en la capital del Turia.
Los jóvenes de Valencia vuelven a la calle. Tras las protestas de la semana pasada, han organizado nuevas movilizaciones contra el ‘tijeretazo’ a la Educación pública para cerrar febrero. A la huelga del día 29, jornada en la que también se manifestarán por las calles de la ciudad, se ha unido la convocatoria de un encierro en dos de las universidades de la región, informa Efe.
Según han anunciado hoy los representantes de diversos sindicatos educativos y universitarios, los jóvenes tienen la intención de encerrarse en los rectorados de la Universitat de València (UV) y de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), para protestar también contra las cargas policiales ocurridas hace unos días.
Los estudiantes, que han asegurado que “somos oídos, pero no somos escuchados”, dicen que “el objetivo principal de la huelga es denunciar los recortes en educación y en la participación estudiantil”.
Según ha indicado Albert Ordóñez, presidente de la Federación Valenciana de Estudiantes (Faavem), en una rueda de prensa en la que han presentado un manifiesto en el que anuncian su intención de ocupar las universidades, los paros convocados este miércoles son el resultado de la inacción de la Generalitat en la gestión de esta crisis.
Unos actos que han dejado 41 estudiantes detenidos, ocho de ellos menores, y un centenar fichados por la policía, tras tres días de carga policial, en las concentraciones que comenzaron frente al instituto público Lluís Vives.
Tras reclamar una educación “pública, laica y de calidad”, así como el aumento del presupuesto destinado a Educación y el cese de los impagos por parte del Gobierno de Fabra, Ordóñez ha asegurado que las movilizaciones van a continuar “de todas las maneras que les sea posible”.
Los estudiantes convocarán nuevas asambleas, manifestaciones, cortes de tráfico o “cualquier herramienta” que esté a su alcance para conseguir el cese de los recortes en Educación, la “limpieza” de los expedientes de los detenidos durante las protestas y la depuración de responsabilidades políticas por las cargas policiales.
El manifiesto presentado también está respaldado por el Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans (SEPC), A Contracorrent, Campus Jove, BEA y el Consejo de Juventud de Valencia (CJV).