Iberdrola ha reunido a más de 400 personalidades en el acto de inauguración de su Torre en Bilbao, que se ha convertido en la nueva sede social de la compañía. A la cita han acudido los Reyes, y múltiples representantes del mundo político, empresarial y del deporte.
Entre ellos, el lehendakari, Patxi López, acompañado de algunos de sus consejeros como Rodolfo Ares, Idoia Mendia, o Carlos Aguirre, además del alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, los diputados generales de Vizcaya y Álava, José Luis Bilbao, y, Javier de Andrés, respectivamente, el ministro de Industria, José Manuel Soria, y la presidenta del Parlamento vasco, Arantza Quiroga.
También se han sumado a la cita dirigentes de distintos partidos políticos como el portavoz del PSE, José Antonio Pastor, el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, o el presidente del BBB del PNV, Andoni Ortuzar. Entre los asistentes se encontraban también el presidente de Confebask, Miguel Angel Lujua, el director del Círculo de Empresarios Vascos, Enrique Portocarrero, el presidente de Vital, Carlos Zapatero, el de BBK, Mario Fernández, el presidente del TSJPV, Juan Luis Ibarra, o el fiscal superior del País Vasco, Juan Calparsoro.
El evento también ha congregado al entrenador de la selección española de fútbol, Vicente del Bosque, al entrenador del Athletic Club de Bilbao, Josu Urrutia, o al rector de la UPV, Iñaki Goirizelaia, entre otros muchos.
Tras disfrutar de un aurresku de honor y de la interpretación de la Sociedad Coral de Bilbao -que ha adaptado para la ocasión la Oda a la Energía, de Pablo Neruda-, los Reyes han procedido a descubrir una placa conmemorativa de la inauguración de la Torre, diseñada por el famoso arquitecto César Pelli, también presente en el acto, y que “simboliza las hondas raíces y el anclaje de Iberdrola a Euskadi”, así como “el firme deseo de mantener nuestros centros de decisión en España”, ha asegurado Galán.
En esta línea, Ignacio Galán ha querido hacer hincapié, en el transcurso de su intervención, en que Iberdrola es en la actualidad, “y tal como fue concebida por los que nos precedieron, una empresa independiente, global, española y con sede en Bilbao”.
El máximo ejecutivo ha subrayado que, gracias al proyecto de internacionalización emprendido en los últimos años, la compañía es, a día de hoy, la quinta empresa eléctrica del mundo, el líder mundial en energía eólica y el primer grupo energético español. Pero tiene su corazón en esta tierra, que la vio nacer hace ya 111 años.
La contribución del grupo al PIB vasco ronda el 2%. En esta línea, realiza compras valoradas en cerca de 1.000 millones de euros anuales a cientos de empresas de la región, sobre las que ejerce un importante efecto arrastre, supone alrededor de un 2% del empleo -directo e indirecto- de toda la comunidad y aporta alrededor de 600 millones de euros al año a las Haciendas vascas.